Hoy en día, El Juego del Calamar se erige como la serie más vista de la plataforma Netflix, generando un asombroso imperio de 900 millones de dólares, pero su creador, Hwang Dong-hyuk, sorteó más de una década de rechazo y fuertes dificultades económicas antes del éxito rotundo de la serie: cuenta la historia que, en un momento dado, tuvo que vender su laptop de 675 dólares para llegar a fin de mes, lo que pone de reflejo esta dura realidad.
Criado en el barrio obrero de Ssangmun-dong en Seúl, Hwang fue testigo directo de la aplastante desigualdad de la sociedad surcoreana. Observó cómo amigos y vecinos se endeudaban, desesperados por encontrar una salida.
Estas experiencias se convirtieron en la base de El Juego del Calamar. El protagonista de la serie, Seong Gi-hun, refleja las propias dificultades de Hwang, mientras que Cho Sang-woo simboliza la inmensa presión social que Hwang sintió durante su estancia en la Universidad Nacional de Seúl.
Así comenzó su historia de éxito el creador de El Juego del Calamar
Los orígenes del guion de Hwang se remontan a 2009, cuando Dong-hyuk conceptualizó la historia que dio origen a The Squid Game. Durante diez largos años, estudios, inversores y actores lo rechazaron repetidamente.
En una entrevista, Hwang compartió que los inversores dudaron de la viabilidad comercial del proyecto, lo que dificultaba enormemente la financiación y el casting.
Hwang concibió El Juego del Calamar como una conmovedora alegoría sobre la sociedad capitalista moderna, retratando la competencia extrema de una manera cercana y comprensible.
El formato de juego de supervivencia, con sus desafíos sencillos y familiares inspirados en la infancia, permitió al público centrarse en el drama humano en lugar de en las complejas reglas.
Sin embargo, a pesar de la narrativa profundamente personal y socialmente relevante, los intentos iniciales de Hwang de presentar el guion fueron recibidos con escepticismo. Los estudios lo calificaron de «demasiado grotesco» y excesivamente complejo.
Hasta que llegó su momento…
Finalmente, el 17 de septiembre de 2021, El Juego del Calamar se estrenó en Netflix. En solo cuatro semanas, esta serie se convirtió en una sensación mundial, acumulando 1650 millones de horas de visualización, ocupando el primer puesto en 94 países y generando un valor de 900 millones de dólares con una inversión inicial de “apenas” 21,4 millones.
El ingreso equivale a un millón 333 mil 333 laptops de 675 dólares como los que Dong-hyuk tuvo que sacrificar 16 años atrás para poder llegar a fin de mes.
Más allá de su éxito comercial, la serie se convirtió en un referente cultural, impulsando conversaciones sobre la desigualdad, el capitalismo y la supervivencia en un mundo despiadado.
Pero lo más importante es que muestra la perseverancia y visión del creador de El Juego del Calamar, Hwang Dong-hyuk, que transformó una lucha de 10 años en una historia que conmovió a millones de personas en todo el mundo.
Información de The Economic Times / Redacción El Financiero
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